El caballero fue atrapado en su armadura, porque después de años sin quitárselo, se había oxidado.
Por fin trató de quitárselo, pero no sabía cómo. ¿Alguna vez te has sentido asfixiado por una situación, que incluso si intentas salir de ella, te atrapan? ¿Has sentido que te has perdido a ti mismo a través del tiempo y no sabes cómo ser quien eras antes? O incluso, ¿has olvidado quién eras antes?
A través de una historia metafórica, Robert Fisher nos muestra el conflicto que muchos de nosotros experimentamos en nuestras vidas. A veces nos aferramos a estímulos negativos que nos han alejado de las cosas importantes de la vida, o nos enfocamos en ellos olvidando nuestra esencia.
Hay momentos en que podemos sentirnos completamente solos y perdidos, pero Fisher nos muestra que con la ayuda de otros, podemos encontrar nuestro camino hacia adentro. El proceso de curación no es rápido ni fácil, porque podemos encontrarnos frente a dragones o entrar en el Castillo del Silencio, donde estamos abrumados por la soledad.
Tal vez nos encontremos hablando con una voz que dice ser nuestro ser interior , o estamos a punto de perder la cordura, porque el camino hacia la felicidad trae muchas barreras. Sin embargo, debemos enfrentar esos temores y dejarnos guiar por aquellos que conocen el camino. Debemos permitirnos sanar, y ser felices.
